Hola, soy Ivan Nogués y voy a contarte que es lo que pasa cuando nos pasa lo que llamamos una "pajara":
Así es como
coloquialmente se conoce a un tipo de agotamiento, concretamente el agotamiento energético.
Esto ocurre cuando las reservas
de glucógeno se agotan después de 90-120 minutos de trabajo continuo, obligando
a un cambio drástico en el uso de vía de energía y por lo general una gran
caída en el rendimiento. Como el mecanismo vital también consume energía lo que
el cuerpo hace es cortar la energía que se agota en otros organismos, en este
caso el muscular para el movimiento.
El glucógeno (que es la forma de
la glucosa que se almacena en el músculo) se rompe para proporcionar la energía
necesaria para la formación del ATP
y a su vez produce ácido pirúvico. El ATP (Ademosin Trifosfato) es la
fuente de energía necesaria para contraer los músculos y por lo tanto para
realizar cualquier actividad física. Cuando el ATP se rompe en ADP (adenosín
difosfato) y Pi (fosfato) se libera energía, y esta es la energía que se
utiliza para la contracción muscular.
El ácido láctico (que se produce
durante este proceso) se va acumulando en las células musculares y provoca que
el interior del músculo se vuelva más ácido. Este entorno ácido interfiere con
el proceso químico de la formación de ATP.
Cuando
disminuye el nivel de ATP se produce la fatiga muscular ya que hay menos
energía para generar contracciones musculares.
En resumen, si el cuerpo ya no tiene energía para poder
“sobrevivir” desconecta los órganos no vitales (musculatura para el movimiento)
para poder utilizar la poca energía que tiene en los órganos más necesarios
para vivir.
Esto es lo que les ocurre a esos deportistas que ves que, de pronto, ya no pueden realizar esfuerzo y a penas se mantienen en pie.